Silvio Berlusconi anda loco con Ronaldinho. El máximo accionista del Milan está dispuesto a todo para lograr la contratación del brasileño, una operación que antes admitía tratarse de un sueño imposible pero que ahora ya ve como una opción real. “Hay una buena posibilidad”, admitió el presidente rossonero durante un intervalo del consejo comunal de Milan. Una previsión optimista que, curiosamente, llega después de anunciar que colocaba a su club en la pole para hacerse con el azulgrana y de la visita de Roberto de Assis a Milan donde asistió, invitado por el propio Berlusconi, a presenciar el Milan-Inter y visitar las instalaciones de Milanello.
Tras esta visita el pasado martes al centro deportivo, Roberto de Assis se reunió con Adriano Galliani y Ariedo Braida en la sede del club para discutir la posible contratación de Ronaldinho. Galliani, según infirma Corriere dello sport, ratificó en este encuentro el interés del Milán para abrir la negociación en el caso de que Ronaldinho no sea renovado por el Barça. "Milan está listo para intervenir si Ronaldinho se va de Barcelona. El Barça y el jugador lo saben", dijo Galliani, la mano derecha de Berlusconi en el club.
El Milan, según estas informaciones, habría ofrecido al manager y hermano del jugador ocho millones de euros por temporada, cediéndole la totalidad de los derechos, como ya hizo con Ronaldo, lo que compensaría para Ronaldinho la diferencia de sus reclamos actuales.
El club italiano estaría dispuesto también a ofrecer al Barça hasta 110 millones de euros para lograr a Ronaldinho. El traspaso, en caso de producirse, sería el más caro de la historia del fútbol. La cláusula de rescisión de Ronaldinho con el Barça es de 125 millones de euros.
‘Il Cavaliere’ está convencido de que con dinero podrá ver cumplido su deseo en realidad. También cree que tanta insistencia tendrá al final su recompensa: “No sé cuanto valdrá la promesa de fidelidad de por vida de Ronaldinho al Barcelona”, aseguró Berlusconi.
La situación parece que va cambiando día a día porque lo que antes era una operación imposible según la propia versión de los responsables del Milan ahora ya ven visos de ser realidad.
El Milan lanzó días atrás una iniciativa que se asemeja a una especie de ‘accionariado popular’ con el objetivo de que sean los mismos ‘tifosi’ del club quienes den su aporte a un fondo destinado a comprar jugadores. Consiste, en práctica, en la adquisición de una tarjeta de crédito personalizada, con la que sus poseedores gozarán de diferentes beneficios, a cambio de la cesión de un porcentaje a un fondo común que manejará un banco que opera en la órbita financiera de Berlusconi. El presidente del club quiere lograr por todos los medios a Ronaldinho, su sueño y el de la afición.
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